domingo, 14 de febrero de 2010

Desempolvando sentimientos....

He escrito muchas cartas a lo largo de mi vida. Algunas con destinatario y otras sin él. La mayoría se han perdido con el tiempo, otras reposan entre el polvo y los recuerdos, olvidadas. en algún cajón. Lo maravilloso es que un día por casualidad, te encuentras con un manojo de papeles amarillentos en los que expresaste lo que te pasaba por la cabeza y especialmente por el corazón, y te sorprendes reviviendo esos momentos que hacen que la vida sea maravillosa.
Hoy voy a dejar en esta entrada, una carta que escribí en el año 2001. No importa a quién iba dirigida, porque esa persona hace muchos años que no forma parte de mi vida, aunque guardo un grato recuerdo de él. Releyendo las líneas que le dediqué, sé que lo quise mucho. Y mira por dónde, hoy me apetece rescatar esa carta, no por añoranza ni por pena. No es que de repente me encuentre extrañando a alguien que forma parte de mi pasado, es simplemente que me parece maravillosa la capacidad de amar que tiene el ser humano. Cuando piensas que jamás volverás a enamorarte, cuando crees que sin "esa persona" no eres nada, y que el mundo se derrumba a tus pies, te sorprendes nuevamente con mariposas revoloteando en tu interior, y vuelves a querer, y vuelves a entregarte, y vuelves a creer que es el amor de tu vida, y deseas no separarte nunca de él.
El amor es infinito, una fuente inagotable de sentimientos y emociones, y el mayor regalo, es estar vivos para descubrirlo.
La carta decía así:
"Para ti, donde quiera que te encuentres mirando esa estrella que cada noche nos hace cómplices de un sueño del que no queremos despertar.
Para ti, que en este momento formas parte de mi vida, van dedicadas estas líneas que escribí en la soledad de mis noches, imaginándote, soñándote, recordándote.
Para ti porque me envuelves de ternura y de pasión.

Para ti porque te imagino mientras te susurro al oido tantas y tantas cosas que guardaba en mi interior, compartiendo los secretos más íntimos, los pensamientos más hermosos, y otros muchos sentimientos que dormían placenteramente en mi ser, esperando que alguien como tú, los despertara de su letargo.

Para ti porque me has devuelto las ganas de confíar en el AMOR en mayúsucula. La magia de soñar con unos besos, con un abrazo.
Ahora que nuestros sentimientos se conocen, nuestros corazones hablan el mismo lenguaje...ese que sólo dos personas enamoradas son capaces de entender.
Ojalá podamos construir juntos los sueños más hermosos, los proyectos más entusiastas, un mañana mejor. Un mañana donde tú y yo, seamos un "nosotros". Un mañana donde ambos miremos en una misma dirección y veamos las mismas cosas, las mismas ilusiones, los mismos deseos, las mismas ansias de compartir todo aquello que nos da la vida.

Esa persona con la que he soñado tantas noches, con la que he hablado en silencio tantas veces, con la que he reído y he llorado en tantas ocasiones, por fin tienen un rostro, un aroma, una sonrisa y un nombre.
Por todo eso, pero principalmente porque te quiero, vayan estas líneas para ti".

1 comentario:

  1. Amar es el más preciado regalo que se puede dar; ser amado el más preciado regalo que se puede recibir
    Lo pasado ya pasó, lo que viene hay que esperar, entonces vive el presente porque es un regalo que se te ha concedido

    ResponderEliminar

Gracias por dejar tu huella